El
CSCL Globe es uno de los mayores buques de contenedores del mundo, pero ya
están en marcha proyectos de construcción de naves de mayor capacidad.
Los grandes buques cargueros que abastecen las rutas del
comercio global están haciéndose aún más grandes, lo que por un lado reduce el
costo del transporte transoceánico, pero por el otro eleva los temores de los
operadores de las naves, compañías de seguro y reguladores sobre el potencial
de accidentes catastróficos.
Los
buques, diseñados para llevar su carga en grandes contenedores de metal,
transportan la mayor parte de los envíos marítimos del mundo, incluyendo bienes
manufacturados y, cada vez más, productos agrícolas. Su creciente tamaño
ya exprime la capacidad de descarga en algunos puertos y, junto con problemas
de mano de obra, ha causado grandes atolladeros de tráfico en los puertos de la
costa oeste de Estados Unidos.
Desde la crisis económica, las navieras han intentado mantenerse competitivas con
buques de mayor tamaño y más eficientes en el consumo de combustible para sus
principales rutas, lo que reduce el costo por contenedor.
Hoy en día, los buques de contenedores más grandes y modernos pueden transportar
18.000 unidades equivalentes a veinte pies (TEU, por sus siglas en inglés, y el
estándar de la industria). Los analistas prevén que buques de 22.000 TEU
entren en servicio para 2018, y que ya están en diseño los barcos de 24.000
TEU.
Los
buques más grandes pondrán a prueba la capacidad de los puertos y canales y las
destrezas de los capitanes y sus tripulaciones.
Hay una escasez mundial de marinos calificados para
comandar estas embarcaciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Escriba sus comentarios aqui: